Los peatones se preguntan muchas veces «Me atropelló una moto ¿qué hago?» Descubre lo que un abogado especializado en atropellos tiene que decir.

Los peatones son, en la mayoría de los atropellos por moto, los grandes perjudicados en cuanto a daños personales, debido a que físicamente son los sujetos más desprotegidos, y en caso de sufrir un atropello reciben el impacto de la moto de manera directa, con las graves consecuencias que ello tiene para su integridad física.

En las grandes ciudades, las prisas y la falta de atención son las causas principales de los atropellos. En algunas ocasiones son los propios peatones los que contribuyen a generar el riesgo, cruzando de manera indebida, o sin prestar atención. No obstante, en la mayoría de los casos los atropellos se producen porque los conductores no van atentos a las circunstancias del tráfico, no respetan los semáforos (atención al famoso “ambar” para cruzar) o van con tanta prisa que ni se fijan en los pasos de peatones. Incluso hemos constatado un aumento de los atropellos en los parkings de los centros comerciales.

Ser atropellado por un coche o una moto implica de momento, que un medio de transporte de peso y envergadura impacta directamente con nuestro cuerpo, lo que en la mayoría de las ocasiones suele provocar que salgamos desplazados unos metros, que serán más o menos según la velocidad a la que iba el vehículo o motocicleta que nos atropelló.

Atropello por una moto

Los atropellos por motocicletas han aumentado en los últimos años, por ser un medio de desplazamiento que cada vez gana más adeptos en las grandes ciudades sobre  todo, y porque en muchas ocasiones las motocicletas circulan con exceso de velocidad, lo que provoca que se reduce de manera importante su capacidad para reaccionar a tiempo de evitar el atropello. En estas ocasiones el peatón atropellado suele salir muy mal parado, pues los impactos suelen ser fuertes, el peatón es lanzado varios metros y al caer en la calzada es cuando sufren las lesiones propias de este tipo de accidentes.

En un atropello de estas características debemos actuar siguiendo en principio las mismas pautas que en cualquier otro atropello. Llamar a los servicios de emergencias, evitar moverse, llamar a la Guardia Civil o Policía Municipal para que levanten el oportuno Atestado, y tratar de recabar datos de testigos del atropello, son pasos fundamentales que deben darse en estos casos.

Puede ocurrir que la motocicleta causante del atropello se dé a la fuga, de ahí la importancia de hablar con las personas que hayan podido presenciar el accidente para que manifiesten a los agentes de la autoridad la dinámica del accidente y los datos de la motocicleta responsable si han podido cogerlos.

Puede ocurrir que a consecuencia de las lesiones sufridas en el atropello nos tengan que evacuar del lugar del accidente los servicios de emergencia. OJO en estos casos porque pueden ser aprovechados por el conductor responsable del atropello para dar una versión del accidente distinta a fin de eximirse de su responsabilidad.

En esos casos es conveniente siempre, en el momento en que podamos, contactar con la policía o Guardia Civil para dar nuestra versión del accidente, y que quede constancia de cara a la futura reclamación.

Concurrencia de culpas

Es importante saber que aunque hayamos sido atropellados cruzando por lugar indebido, debemos consultar sobre las opciones de reclamar por nuestras lesiones, pues no debemos olvidar que quien conduce un vehículo a motor, de la clase que sea, genera un riesgo por si mismos, y que en ocasiones puede entenderse que ha existido una concurrencia de culpas entre las partes intervinientes en el atropello. Por ello Legalcar siempre recomienda consultar el caso lo antes posible, para saber de mano de un profesional si es factible la reclamación.

Lesiones y daños materiales

Las lesiones derivadas del atropello de un peatón por una motocicleta suelen ser de gravedad, por el tipo de impacto que recibe la víctima, y las más comunes suelen ser fracturas de cadera, o de huesos de extremidades superiores o inferiores (brazos y piernas). A veces también se producen fracturas de muñeca, al apoyar las manos en el suelo instintivamente al caer al suelo.

Y por supuesto suele haber esguinces cervicales o lumbares, provocados por el golpe al caer al suelo tras el atropello.

Estas lesiones deben diagnosticarse desde el principio en los informes de urgencias, y el lesionado tendrá que seguir un periodo de tratamiento más o menos largo que es importante acreditar con todos los justificantes e informes médicos que podamos, porque de ellos va a depender luego el éxito de la reclamación.

En cuanto a los daños materiales, podrán reclamarse aquellos objetos que hayan sido dañados en el atropello, por ejemplo relojes, o móviles, bien con facturas de compra o presupuestos de arreglo.

Especializados en atropellos

En cualquier caso, el 1 de enero de 2016 han entrado en vigor unas modificaciones legislativas que afectan directamente a las reclamaciones derivadas de accidentes de circulación, por ello, por su especial complejidad y porque es necesario conocer en qué pueden afectarnos, hoy más que nunca es necesario que la víctima de un accidente de tráfico contacte lo antes posible con LegalCar, que es quien mejor podrá asesorar a la víctima desde el primer momento.

No hay que olvidar, además, que si el peatón atropellado cuenta con seguro de hogar, es muy probable que el mismo le cubra todos los gastos legales.